Fundamentos de Infectologa

BACTERIEMIA
La bacteriemia, que es la presencia de bacterias en el flujo sanguíneo, es una situación frecuente y normalmente no provoca síntomas. Las bacterias que entran en el flujo sanguíneo, por lo general, son rápidamente eliminadas por los glóbulos blancos. Sin embargo, en ciertos casos, la cantidad de bacterias es demasiado grande como para que puedan ser eliminadas fácilmente y aparece una infección llamada sepsis, que causa síntomas graves. En algunos casos, la sepsis desemboca en una situación que puede ser mortal y que recibe el nombre de shock séptico.
Bacteriemia y sepsis
La bacteriemia es la presencia de bacterias en el flujo sanguíneo. La sepsis es una infección en el flujo sanguíneo.
Cuando una persona cierra firmemente la mandíbula, puede producirse una bacteriemia muy leve y temporal ya que las bacterias que viven en las encías que rodean los dientes son forzadas a penetrar en el flujo sanguíneo. Las bacterias a menudo acceden a éste desde el intestino, pero son rápidamente eliminadas cuando la sangre atraviesa el hígado.
La sepsis es más probable que aparezca cuando existe una infección en el organismo, ya sea en los pulmones, el abdomen, las vías urinarias o la piel. También puede producirse cuando se realiza cirugía sobre un área infectada, o bien sobre una parte del cuerpo en la que normalmente crecen las bacterias, como por ejemplo el intestino.
La inserción de un objeto extraño, como un catéter intravenoso, una sonda urinaria o un tubo de drenaje, también puede causar sepsis. La probabilidad de sepsis aumenta con el tiempo que permanece colocado tal objeto. Suele ser frecuente entre los adictos a drogas intravenosas. También es más probable que ocurra en una persona cuyo sistema inmunitario no funciona correctamente, como sucede por ejemplo en quienes reciben fármacos anticancerosos.
Síntomas
Como el organismo suele ser capaz de eliminar pequeñas cantidades de bacterias rápidamente, la bacteriemia transitoria casi nunca produce síntomas. Sin embargo, una vez que la sepsis se ha establecido, los síntomas incluyen temblores, escalofríos, fiebre, debilidad, náuseas, vómitos y diarrea.
La sepsis puede causar infecciones en distintos puntos del cuerpo (llamada infección metastásica) si no se trata de inmediato. Las infecciones pueden asentarse en el revestimiento del cerebro (meningitis), en el saco que rodea el corazón (pericarditis), en el revestimiento interno del corazón (endocarditis), en los huesos (osteomielitis) y en las grandes articulaciones. Un absceso (acumulación de pus) puede aparecer casi en cualquier sitio.
Diagnóstico
El diagnóstico de sepsis es probable cuando una persona con una infección localizada en cualquier parte del cuerpo de pronto tiene mucha fiebre. Si la persona tiene una sepsis, por lo general, el número de glóbulos blancos en la sangre suele aumentar. Los cultivos de sangre permiten aislar e identificar al microorganismo infectante.
Sin embargo, es posible que las bacterias no crezcan en un cultivo de sangre, particularmente si el enfermo está tomando antibióticos. También se toman muestras para cultivo del material expulsado de los pulmones mediante la tos (esputo), de la orina, de las heridas y de los puntos donde los catéteres penetran en el cuerpo.
Tratamiento y pronóstico
La bacteriemia causada por una intervención quirúrgica o bien por la inserción de una sonda en la vía urinaria no suele necesitar tratamiento, siempre y cuando dicha sonda se retire rápidamente. Sin embargo, antes de someterse a estos procesos, las personas con riesgo de desarrollar infecciones graves (las que padecen una enfermedad de las válvulas cardíacas o deficiencias en su sistema inmunitario, por ejemplo) por lo general reciben antibióticos para prevenir la sepsis.
La sepsis es muy grave y el riesgo de muerte es alto. El médico debe comenzar el tratamiento con antibióticos de inmediato, incluso antes de disponer de los resultados del cultivo de laboratorio que identifique la clase de bacteria que provoca la infección.
Un retraso en el comienzo del tratamiento disminuye en gran medida las posibilidades de supervivencia. Al comienzo, el médico basa la elección del antibiótico en su suposición acerca de cuáles son las bacterias allí presentes. Esto depende de dónde haya comenzado la infección (las vías urinarias, la boca, los pulmones, el intestino u otro sitio). A menudo se administran dos antibióticos juntos para incrementar las posibilidades de eliminar las bacterias. Más tarde, cuando el médico ya puede contar con los resultados del cultivo, puede utilizar el que resulte más eficaz contra los gérmenes causantes de las sepsis. En algunos casos, puede ser necesario realizar una intervención quirúrgica para eliminar la fuente de infección, como por ejemplo un absceso
SIFILIS
La sífilis es una enfermedad de transmisión sexual (ETS) causada por la bacteria Treponema pallidum. A menudo se le ha llamado “la gran imitadora” porque muchos de sus signos y síntomas no se distinguen fácilmente de otras enfermedades.
EPIDEMIOLOGIA
En los Estados Unidos, las autoridades de salud registraron más de 36,000 casos de sífilis en el 2006, de los cuales 9,756 eran de sífilis primaria y secundaria. Asimismo, la mitad de todos los casos de sífilis primaria y secundaria en el 2006 se reportaron en 20 condados y 2 ciudades, y en su mayoría correspondían a personas de 20 a 39 años de edad. La incidencia más alta de sífilis primaria y secundaria se registró en mujeres de 20 a 24 años de edad y en hombres de 35 a 39 años. Los casos de sífilis congénita reportados en recién nacidos aumentaron de 339 casos nuevos en el 2005 a 349 en el 2006.
Entre el 2005 y el 2006, el número de casos reportados de sífilis primaria y secundaria aumentó en un 11.8%. Entre el 2000 y el 2006 las tasas de sífilis primaria y secundaria en hombres se incrementaron anualmente de 2.6 a 5.7, mientras que en las mujeres esto mismo ocurrió entre el 2004 y el 2006. En el 2006, el 64% de los casos reportados de sífilis primaria y secundaria correspondieron a hombres que tienen relaciones sexuales con hombres (HSH).
MODO DE CONTAGIO
La sífilis se pasa de una persona a otra a través del contacto directo con una úlcera sifilítica. Las úlceras aparecen principalmente en los genitales externos, la vagina, el ano o el recto. También pueden salir en los labios y en la boca. La transmisión de la bacteria ocurre durante las relaciones sexuales vaginales, anales u orales. Las mujeres embarazadas que tienen esta enfermedad pueden pasársela a los bebés que llevan en el vientre. La sífilis no se propaga por el contacto con los inodoros, las manijas de las puertas, las piscinas, las bañeras normales o de hidromasaje, ni por compartir ropa o cubiertos.
SIGNOS Y SINTOMAS
Muchas personas que tienen sífilis no presentan síntomas durante años, pero aun así enfrentan el riesgo de tener complicaciones en la fase avanzada si no se tratan la enfermedad. Las personas que están en la fase primaria o secundaria de la enfermedad transmiten la infección aunque muchas veces las úlceras sifilíticas no se puedan reconocer. Por lo tanto, las personas que no saben que están infectadas pueden contagiar la enfermedad.
Fase primaria: La fase primaria de la sífilis suele estar marcada por la aparición de una sola úlcera (llamada chancro), pero puede que haya muchas. El tiempo que transcurre entre la infección por sífilis y la aparición del primer síntoma puede variar de 10 a 90 días (con un promedio de 21 días). Por lo general, el chancro es firme, redondo, pequeño e indoloro. Aparece en el sitio por donde la sífilis entró al organismo. El chancro dura de 3 a 6 semanas y desaparece sin ser tratado. Sin embargo, si no se administra el tratamiento adecuado la infección avanza a la fase secundaria.
Fase secundaria: La fase secundaria se caracteriza por erupciones en la piel y lesiones en las membranas mucosas. Esta fase suele comenzar con la aparición de una erupción de la piel en una o más áreas del cuerpo, que por lo general no produce picazón. Las erupciones de la piel asociadas a la sífilis secundaria pueden aparecer cuando el chancro se está curando o varias semanas después de que se haya curado. La erupción característica de la sífilis secundaria puede tomar el aspecto de puntos rugosos, de color rojo o marrón rojizo, tanto en la palma de las manos como en la planta de los pies. Sin embargo, en otras partes del cuerpo también pueden aparecer erupciones de aspecto distinto, o que son similares a las causadas por otras enfermedades. Algunas veces, las erupciones asociadas a la sífilis secundaria son tan leves que pasan desapercibidas. Además, puede que se presenten otros síntomas durante la fase secundaria de la sífilis, como fiebre, inflamación de los ganglios linfáticos, dolor de garganta, caída del cabello en algunas áreas, dolor de cabeza, pérdida de peso, dolores musculares y fatiga. Los signos y síntomas de la sífilis secundaria desaparecen aun si no son tratados, pero si no se administra tratamiento la infección progresará a la fase latente y posiblemente hasta la última fase de la enfermedad.
Fases latente y terciaria: La fase latente (oculta) de la sífilis comienza con la desaparición de los síntomas de las fases primaria y secundaria. Sin tratamiento, la persona infectada seguirá teniendo sífilis aun cuando no presente signos o síntomas ya que la infección permanece en el cuerpo. Esta fase latente puede durar años. En el 15% de las personas que no reciben tratamiento para la sífilis, la enfermedad puede avanzar hasta las fases latente y terciaria, que pueden aparecer de 10 a 20 años después de haberse adquirido la infección. En esta fase avanzada la sífilis puede afectar posteriormente órganos internos como el cerebro, los nervios, los ojos, el corazón, los vasos sanguíneos, el hígado, los huesos y las articulaciones. Los signos y síntomas de la fase terciaria de la sífilis incluyen dificultad para coordinar los movimientos musculares, parálisis, entumecimiento, ceguera gradual y demencia. El daño puede ser grave y causar la muerte.
La bacteria de la sífilis puede infectar al bebé durante el embarazo. Dependiendo de cuánto tiempo una mujer embarazada ha estado infectada, puede enfrentar un alto riesgo de tener un bebé que nazca muerto o de dar a luz un bebé que muere poco después de haber nacido. Un bebé infectado puede que nazca sin los signos y síntomas de la enfermedad. Sin embargo, si no es sometido a tratamiento de inmediato, el bebé puede presentar serios problemas al cabo de unas cuantas semanas. Si estos bebés no reciben tratamiento, pueden sufrir de retraso en el desarrollo, convulsiones o morir.
DIAGNOSTICO
Algunos médicos pueden diagnosticar la sífilis mediante el análisis de una muestra líquida del chancro (la úlcera infecciosa) en un microscopio especial llamado microscopio de campo oscuro. Si las bacterias de la sífilis están presentes en la úlcera, se observarán en el microscopio.
Otra manera de determinar si una persona tiene sífilis es mediante un análisis de sangre. Poco después de que una persona se infecta comienza a producir anticuerpos contra la sífilis que pueden ser detectados mediante una prueba de sangre segura, precisa y económica. El cuerpo presentará niveles bajos de anticuerpos en la sangre durante meses o incluso años después de que se haya completado el tratamiento de la enfermedad. Dado que la sífilis no tratada en una mujer embarazada puede infectar y posiblemente provocar la muerte de su bebé, toda mujer embarazada debe hacerse un análisis de sangre para detectar la sífilis.
SIFILIS Y VIH
Las úlceras genitales (chancros) producidas por la sífilis hacen que sea más fácil contraer la infección por el VIH y transmitirla por vía sexual. Se calcula que el riesgo de contraer la infección por el VIH es 2 a 5 veces mayor cuando la persona expuesta al virus tiene sífilis.
Las ETS ulcerosas que producen llagas, úlceras o rupturas de la piel o de las membranas mucosas, tales como la sífilis, rompen las barreras que protegen contra las infecciones. Las úlceras genitales producidas por la sífilis pueden sangrar fácilmente y cuando entran en contacto con la mucosa bucal o rectal durante la relación sexual aumentan las probabilidades de infección y la susceptibilidad al VIH. El tener otras ETS también puede ser un factor importante para predecir una posible infección por el VIH, ya que las ETS son un marcador de las conductas asociadas a la transmisión del VIH.
TRATAMIENTO
La sífilis es fácil de curar en sus fases iniciales. Si una persona ha tenido sífilis durante menos de un año, la enfermedad se curará con una sola inyección intramuscular de penicilina, que es un antibiótico, y si ha tenido sífilis por más de un año, necesitará dosis adicionales. Existen otros antibióticos para tratar la sífilis en personas que son alérgicas a la penicilina. La sífilis no puede curarse con remedios caseros ni con medicinas que se venden sin receta médica. El tratamiento matará la bacteria que causa la sífilis y evitará futuras lesiones, pero no remediará las lesiones ya ocasionadas.
Ya que existe un tratamiento eficaz contra la sífilis, es importante que periódicamente las personas se hagan las pruebas de detección de esta enfermedad si practican conductas sexuales que las ponen a riesgo de contraer ETS.
Las personas que estén tratándose contra la sífilis deben abstenerse de tener contactos sexuales con parejas nuevas hasta que las úlceras sifilíticas se hayan curado por completo. Las personas que tienen sífilis deben avisar inmediatamente a sus parejas para que se sometan a pruebas y reciban tratamiento si es necesario.
El hecho de que una persona haya tenido sífilis una vez no la protege de tenerla de nuevo. Una persona puede seguir siendo susceptible a la reinfección aun cuando se haya curado con el tratamiento. Solamente las pruebas de laboratorio pueden confirmar si una persona tiene sífilis. Dado que las úlceras sifilíticas pueden estar ocultas en la vagina, el recto o la boca, puede ser que una persona no se entere de que su pareja sexual tiene sífilis. El médico le ayudará a determinar si es necesario hacer nuevas pruebas de detección de la sífilis después de que haya concluido el tratamiento.
PREVENCION
La manera más segura de evitar contraer enfermedades de transmisión sexual, incluida la sífilis, es abstenerse del contacto sexual o tener una relación estable y mutuamente monógama con una pareja que se haya hecho las pruebas y que se sabe que no tiene ninguna infección.
Abstenerse de consumir alcohol y drogas puede también ayudar a evitar la transmisión de la sífilis, ya que estas actividades pueden llevar a una conducta sexual peligrosa. Es importante que las parejas sexuales hablen entre ellas sobre si tienen el VIH o si en el pasado han tenido otras ETS, de manera que puedan tomar acciones preventivas.
Las enfermedades genitales ulcerosas, como la sífilis, pueden aparecer tanto en las áreas genitales masculinas como las femeninas que hayan estado cubiertas o protegidas con un condón de látex, así como en áreas que no estuvieron cubiertas durante la relación sexual. El uso correcto y habitual de los condones de látex puede reducir el riesgo de contraer sífilis, herpes genitales y chancros, solamente si el área infectada o el área de posible contacto está cubierta.
Los condones lubricados con espermicidas (especialmente el Nonoxynol-9 o N-9) no son más eficaces para prevenir la transmisión de las ETS que los otros condones lubricados. El uso de condones lubricados con N-9 no se recomienda para prevenir la infección de las ETS o del VIH. La transmisión de una ETS, incluida la sífilis, no puede prevenirse con lavarse los genitales, orinar o darse una ducha vaginal después de la relación sexual. Cualquier secreción, úlcera o irritación anormal, en particular en el área de la ingle, debe considerarse como una señal para dejar de tener relaciones sexuales y consultar al médico de inmediato
TUBERCULOSIS
La tuberculosis o TB, es una enfermedad causada por microbios que se propagan de una persona a otra a través del aire. La tuberculosis generalmente afecta los pulmones, pero también puede afectar otras partes del cuerpo, como el cerebro, los riñones o la columna vertebral. Una persona enferma de tuberculosis puede morir si no recibe tratamiento.
Síntomas de la tuberculosis
Los síntomas generales de la tuberculosis incluyen malestar o debilidad, pérdida de peso, fiebre y sudores nocturnos. Los síntomas de tuberculosis en los pulmones también incluyen tos, dolor de pecho y tos con sangre. Los síntomas de tuberculosis en otras partes del cuerpo dependen del área afectada.
Cuando una persona enferma de tuberculosis en los pulmones o en la garganta tose, estornuda, habla o canta, los microbios de la tuberculosis se liberan en el aire. Estos microbios pueden permanecer en el aire durante varias horas, según el tipo de ambiente en que se encuentren. Las personas que respiran el aire que contiene los microbios de la tuberculosis pueden infectarse; a esto se le llama infección de tuberculosis latente.
diferencia entre la infección de tuberculosis latente y la tuberculosis activa
Las personas con infección de tuberculosis latente tienen los microbios de la tuberculosis en su cuerpo pero no están enfermas, porque los microbios no están activos. Estas personas no tienen los síntomas de la tuberculosis activa y no pueden contagiar los microbios a los demás. Sin embargo, en un futuro, pueden enfermarse de tuberculosis. A menudo se les prescribe un tratamiento para prevenir la aparición de la enfermedad (tuberculosis activa).
Las personas con tuberculosis activa tienen los microbios de la tuberculosis activos, lo que significa que se están multiplicando y están destruyendo tejidos del cuerpo. Por lo general, tienen síntomas de la tuberculosis activa. Las personas con tuberculosis activa en los pulmones o la garganta pueden propagar los microbios a los demás. A estas personas se les prescriben medicamentos para tratar la tuberculosis activa.
Una persona con la infección de tuberculosis latente no puede propagar esos microbios a los demás. Usted no necesita hacerse pruebas de tuberculosis si ha pasado tiempo con una persona que tiene la infección de tuberculosis latente. Sin embargo, usted debe examinarse si ha estado con alguien que tiene la tuberculosis activa o que presenta los síntomas de tuberculosis.
Las personas enfermas de tuberculosis tienen mayor probabilidad de contagiar a aquellas con quienes pasan tiempo todos los días, como familiares, amigos o compañeros de trabajo.
Pruebas de la tuberculosis
Existen dos pruebas para detectar la infección por tuberculosis: una prueba en la piel y una prueba especial de sangre para detectar la tuberculosis. La prueba cutánea de la tuberculina o método de Mantoux se realiza inyectando en la parte inferior del brazo una pequeña cantidad de líquido llamado tuberculina. La persona a la que se le practicó la prueba debe volver dentro de 48 a 78 horas para que el personal de salud capacitado revise la reacción que ocurre en el brazo. La prueba especial de sangre para detectar la tuberculosis mide la manera en que el sistema inmunitario del paciente reacciona a los microbios causantes de la tuberculosis.
El resultado positivo de una prueba para detectar una infección por tuberculosis solo indica que una persona ha sido infectada por los microbios de la tuberculosis. No muestra si esa persona tiene o no la tuberculosis activa. Para determinar si la persona presenta la enfermedad de la tuberculosis, es necesario hacer otras pruebas, como una radiografía de tórax o un cultivo de esputo.
La BCG es una vacuna contra la tuberculosis. Se utiliza en muchos países, pero por lo general, no se recomienda en los Estados Unidos. La administración de la vacuna BCG no previene del todo la aparición de la enfermedad de la tuberculosis. Además, puede hacer que la prueba de la tuberculina en la piel arroje un resultado falso positivo. Sin embargo, las personas que han recibido la vacuna BCG pueden hacerse la prueba de la tuberculina o la prueba especial de sangre para detectar la tuberculosis.
Si usted tiene la infección de tuberculosis latente pero no la enfermedad activa, es posible que su médico le prescriba un medicamento que mata los microbios de la tuberculosis para prevenir que contraiga la enfermedad. La decisión sobre el tratamiento para la infección de tuberculosis latente se basará en las probabilidades de que usted enferme de tuberculosis. Algunas personas tienen más probabilidad que otras de enfermar de tuberculosis una vez que adquieren la infección. Entre estas personas se incluyen las que han sido infectadas por el VIH, las que recientemente estuvieron expuestas a alguien enfermo de tuberculosis o aquellas con ciertas afecciones médicas.
Tratamiento
La tuberculosis se puede tratar tomando varios medicamentos durante un periodo de 6 a 12 meses. Es muy importante que las personas que estén enfermas de tuberculosis se terminen todos sus medicamentos y los tomen exactamente como indican las instrucciones. Si dejan de tomar sus medicamentos antes de lo previsto, pueden enfermarse de nuevo; si no toman los medicamentos en la forma correcta, los microbios pueden sobrevivir y volverse más resistentes a ese tratamiento. La tuberculosis resistente a los medicamentos es más difícil y más costosa de tratar. En algunos casos, miembros del personal del departamento de salud local se reúnen regularmente con pacientes de tuberculosis para supervisar la manera en que toman sus medicamentos. A esto se le llama terapia por observación directa. Esta terapia contribuye a que el paciente complete su tratamiento en el menor tiempo posible.
Endocarditis infecciosa
Es una infección del revestimiento de las cámaras y válvulas del corazón, causada por bacterias, hongos u otras sustancias infecciosas.
Causas, incidencia y factores de riesgo
La endocarditis normalmente es un resultado de una infección de la sangre. Las bacterias u otra sustancia infecciosa pueden entrar en el torrente sanguíneo durante ciertos procedimientos médicos, incluyendo procedimientos dentales, y viajar al corazón, donde se pueden establecer en las válvulas cardíacas dañadas. Las bacterias pueden proliferar y formar coágulos infectados que se desprenden y viajan al cerebro, los pulmones, los riñones o el bazo.
La mayoría de las personas que desarrollan una endocarditis infecciosa tienen una cardiopatía o problemas en las válvulas subyacentes.
Sin embargo, un microorganismo que comúnmente se encuentra en la boca, el Streptococcus viridans, es responsable de cerca del 50% de todos los casos de endocarditis bacteriana. Ésta es la razón por la cual los procedimientos dentales aumentan las probabilidades de desarrollar esta afección. Tales procedimientos son especialmente riesgosos para niños con cardiopatías congénitas. Como resultado, tomar antibióticos antes de cualquier trabajo dental es una práctica común para niños con algunas formas de cardiopatía congénita y adultos con ciertas afecciones de las válvulas cardíacas.
Otros culpables comunes abarcan Staphylococcus aureus y el enterococo. El Staphylococcus aureus puede infectar las válvulas cardíacas normales y es la causa más común de endocarditis infecciosa en los consumidores de drogas intravenosas.
Las causas menos comunes de endocarditis infecciosa abarcan pseudomonas, serratia y cándida.
Los siguientes factores aumentan las posibilidades de desarrollar endocarditis:
  • Válvulas cardíacas artificiales
  • Cardiopatía congénita (comunicación interauricular, conducto arterial persistente y otras)
  • Problemas de las válvulas cardíacas (tales como una insuficiencia mitral)
  • Antecedentes de cardiopatía reumática
  • Los consumidores de drogas intravenosas también están en riesgo de padecer esta afección, debido a que las agujas sin esterilizar pueden hacer que las bacterias ingresen al torrente sanguíneo.
Síntomas
Los síntomas de endocarditis pueden desarrollarse lentamente (subagudos) o de repente (agudo). La fiebre es el síntoma clásico y puede persistir durante días antes de aparezca cualquier otro síntoma.
Otros síntomas pueden abarcar:
  • Color anormal de la orina
  • Sangre en la orina
  • Escalofríos
  • Sudoración excesiva
  • Fatiga
  • Dolor en las articulaciones
  • Dolores y achaques musculares
  • Anomalías en la uñas (hemorragias en astillas bajo las uñas)
  • Sudores fríos (pueden ser severos)
  • Palidez
  • Manchas rojas en la piel de las palmas de las manos y plantas de los pies, llamadas lesiones de Janeway
  • Nódulos rojos y dolorosos en las yemas de los dedos de las manos y de los pies llamados nódulos de Osler
  • Dificultad para respirar durante actividad
  • Inflamación de los pies, piernas y abdomen
  • Debilidad
  • Pérdida de peso
Signos y exámenes
  • Soplos
  • Esplenomegalia
  • Hemorragias lineales subungueales en las uñas de las manos
  • Los antecedentes de una cardiopatía congénita aumentan el nivel de sospecha.
  • Un examen oftalmológico puede mostrar sangrado en la retina con un área central clara. Esto se conoce como manchas de Roth.
  • Se pueden llevar a cabo los siguientes exámenes:
  • Hemocultivo y pruebas de sensibilidad (para detectar bacterias)
  • Radiografía del tórax
  • Conteo sanguíneo completo (CSC) que puede revelar anemia leve
  • Tomografía computarizada del tórax
  • Ecocardiografía (ecografía del corazón)
  • Tasa de sedimentación eritrocítica (ESR)
  • Ecocardiografía transesofágica
Tratamiento
La persona será hospitalizada, de manera que pueda recibir antibióticos por vía intravenosa. Se requiere tratamiento de antibióticos prolongado y en altas dosis para erradicar las bacterias. Dicho tratamiento generalmente se administra durante 4 a 6 semanas, dependiendo del tipo específico de la bacteria. Los exámenes de sangre le ayudarán al médico a escoger el mejor antibiótico.
Se puede necesitar cirugía para reemplazar las válvulas cardíacas dañadas.
Pronóstico
Por lo general, el tratamiento temprano de una endocarditis bacteriana tiene un pronóstico alentador. Si el diagnóstico y el tratamiento se retrasan puede presentarse daño valvular.
Complicaciones
  • Coágulos sanguíneos o émbolos que viajan al cerebro, los riñones, los pulmones o el abdomen
  • Absceso cerebral
  • Insuficiencia cardiaca congestiva
  • Glomérulonefritis
  • Ictericia
  • Cambios neurológicos
  • Latidos cardíacos irregulares o rápidos, incluyendo fibrilación auricular
  • Daño valvular grave
  • Accidente cerebrovascular
Situaciones que requieren asistencia médica
Se debe consultar al médico si aparecen los siguientes síntomas durante o después del tratamiento:
  • Pérdida de peso sin cambio en la dieta
  • Sangre en la orina
  • Dolor en el pecho
  • Debilidad
  • Entumecimiento o debilidad muscular
  • Fiebre
Prevención
Con frecuencia, se administran antibióticos preventivos a las personas en riesgo de contraer endocarditis infecciosa antes de un procedimiento dental o cirugías que involucren las vías respiratorias, urinarias o intestinales. La Asociación Estadounidense de Cardiología recomienda el uso de antibióticos antes de un procedimiento dental si la persona tiene:
  • Válvulas cardíacas artificiales
  • Ciertos defectos cardíacos congénitos, antes o posiblemente después de la reparación
  • Antecedentes de endocarditis infecciosa
  • Problemas de válvulas después de un trasplante de corazón
  • Se recomienda el control médico continuo para las personas con antecedentes previos de endocarditis infecciosa.
  • Los consumidores de drogas intravenosas deben buscar tratamiento para la adicción. Si esto no es posible, deben usar una aguja nueva para cada inyección, evitando compartir cualquier elemento relacionado con la aplicación de la inyección y utilizando algodón con alcohol antes de inyectarse con el fin de reducir el riesgo.
VIH
El VIH significa “virus de la inmunodeficiencia humana”. Este es el virus que causa el SIDA. El VIH es diferente a la mayoría de los virus porque ataca el sistema inmunitario. El sistema inmunitario le permite al cuerpo combatir las infecciones. El VIH encuentra y destruye un tipo particular de glóbulos blancos (las células T o CD4) utilizados por el sistema inmunitario para combatir las enfermedades.

SIDA
El término SIDA significa síndrome de inmunodeficiencia adquirida. El SIDA representa la etapa final de la infección por el VIH. Es posible que una persona infectada con el VIH tarde varios años en alcanzar esta etapa aun sin recibir tratamiento. En las personas que tienen el SIDA, el virus ha debilitado su sistema inmunitario a tal grado que al cuerpo se le dificulta combatir las infecciones. Se considera que alguien tiene SIDA cuando presenta una o más infecciones y un número bajo de células T

Orígenes del VIH
Los científicos identificaron un tipo de chimpancé en África occidental como la fuente de la infección del VIH en los humanos. El virus muy probablemente pasó de los chimpancés a los humanos que cazaban a estos animales para comer su carne, y al entrar en contacto con la sangre infectada. En el transcurso de varios años el virus se propagó poco a poco por toda África y luego por otras partes del mundo.
Formas en las que se transmite (y no se transmite) el VIH
El VIH es un virus frágil. No puede vivir por mucho tiempo fuera del cuerpo. Por consiguiente, el virus no puede transmitirse durante las actividades cotidianas como saludar, abrazar o mediante un beso casual. Usted no puede contraer la infección de un asiento de inodoro, un bebedero de agua, una perilla de puerta, platos, vasos, alimentos o de los animales domésticos. Tampoco se puede adquirir el VIH de los mosquitos.
El VIH se encuentra principalmente en la sangre, el semen o el flujo vaginal de una persona infectada. El VIH se transmite principalmente en 3 formas:
  1. al tener relaciones sexuales (por medio anal, vaginal u oral) con alguien infectado con el VIH
  2. por compartir agujas y jeringas con alguien infectado con el VIH
  3. por la exposición (en el caso de un feto o bebé) al VIH antes de nacer o durante el parto, o al ser amamantado
El VIH también puede transmitirse por medio de la sangre infectada con el VIH. Sin embargo, desde 1985, toda la sangre donada en Estados Unidos se examina para detectar si está infectada por el VIH. Debido a esto, el riesgo de infección a través de transfusiones de sangre o de hemoderivados es sumamente bajo.
Factores de riesgo para la transmisión del VIH
  • se inyectó drogas o esteroides utilizando equipo contaminado con sangre (como agujas, jeringas, algodón, agua) que compartió con otras personas
  • tuvo relaciones sexuales sin protección por medio vaginal, anal u oral (es decir relaciones sexuales sin condón) con hombres que tienen relaciones sexuales con hombres, con más de una pareja, o con una persona que no conocía
  • tuvo relaciones sexuales a cambio de drogas o dinero
  • se le detectó, o ha recibido tratamiento para, hepatitis, tuberculosis (TB), o alguna enfermedad de transmisión sexual (ETS) como la sífilis
  • recibió una transfusión de sangre o de factores coagulantes entre 1978 y 1985
  • tuvo relaciones sexuales sin protección con alguien que tiene cualquiera de los factores de riesgo mencionados anteriormente
Cómo prevenir la transmisión
  • abstenerse de tener relaciones sexuales (no tener relaciones por medio oral, anal o vaginal) hasta que esté en una relación exclusiva con una sola persona, tener relaciones sexuales solamente entre dos, y saber que ninguno de los dos tiene el VIH
  • si tanto usted como su pareja tienen el VIH, use condones para prevenir otras enfermedades de transmisión sexual (ETS) y una posible infección con una cepa diferente del VIH
  • si solamente una persona en la pareja tiene el VIH, use condones de látex y lubricante cada vez que tiene relaciones sexuales
  • si tiene, o piensa tener, más de una pareja sexual, piense en tomar alguna de las siguientes medidas de precaución:
  • hágase la prueba del VIH
  • si usted es un hombre que tiene relaciones sexuales con otros hombres, hágase la prueba de detección al menos una vez al año
  • si usted es mujer y está embarazada o piensa embarazarse, hágase la prueba de detección lo antes posible, antes de tener a su bebé
  • hable acerca del VIH y otras ETS con cada pareja antes de tener relaciones sexuales con ella
  • entérese lo más que pueda sobre el pasado sexual de su pareja (uso de drogas y comportamiento sexual), y tome en cuenta los posibles riesgos a su salud antes de tener relaciones sexuales con esa pareja
  • pregúntele a sus parejas sexuales si se han hecho la prueba del VIH recientemente y aliente a quienes no se la hayan hecho a que se la hagan
  • use condones de látex y lubricante cada vez que tenga relaciones sexuales
  • si piensa que estuvo expuesto a otra ETS como gonorrea, sífilis o una infección de Chlamydia trachomatis, busque tratamiento. estas enfermedades pueden incrementar el riesgo de la transmisión del VIH
  • aun cuando piense que usted tiene un riesgo menor de infección con el VIH, hágase la prueba siempre que vaya al médico para su examen físico general
  • no se inyecte drogas ilegales (drogas que no son recetadas por su médico). Usted puede contagiarse con el VIH a través de agujas, jeringas y otros artículos que estén contaminados con la sangre de alguien que tiene el VIH. Además, las drogas pueden entorpecer sus facultades mentales, lo cual podría aumentar las posibilidades de tener relaciones sexuales sin las medidas de prevención necesarias.
  • si se inyecta drogas ilegales:
  • use solamente agujas, jeringas y otros artículos que estén limpios
  • nunca comparta agujas, jeringas ni otros artículos empleados para inyectarse
  • tenga cuidado de no exponerse a la sangre de otra persona
  • hágase la prueba del VIH por lo menos una vez al año
  • piense en la posibilidad de recibir consejería y tratamiento para dejar de usar drogas.
  • No tenga relaciones sexuales después de haber tomado drogas o bebidas alcohólicas porque esto podría aumentar las posibilidades de tener relaciones sexuales sin las medidas de prevención necesarias.
Síntomas de infección
La única manera de saber con seguridad si se está infectado es haciéndose la prueba del VIH. No puede saber si está infectado simplemente con base en los síntomas, porque muchas personas infectadas con el VIH no tienen síntomas por varios años.
Pruebas del VIH
Una vez que el VIH entra en el cuerpo, éste empieza a producir anticuerpos (substancias creadas por el sistema inmunitario después de una infección). La mayoría de las pruebas de detección del VIH buscan la presencia de anticuerpos en lugar de buscar el virus mismo. Hay diferentes tipos de pruebas para detectar el VIH, como las pruebas rápidas y las pruebas que pueden realizarse en casa.

TETANOS

Es una enfermedad grave, a veces mortal, y pese a que en los últimos años ha disminuido el número de casos en los países desarrollados, debido a los programas de vacunación que se instituyeron, no obstante MAS DE UN MILLON DE MUERTES ANUALES siguen ocurriendo en el mundo, especialmente en niños recién nacidos en por falta de un seguimiento y control efectivo de las inmunizaciones específicas.
Agente etiológico: Es un bacilo: clostridium tetani que actúa a través de su exotoxina. El germen requiere para su proliferación un medio anaerobio (es decir carente de oxígeno), y lo encuentra en el sitio de ciertas lesiones traumáticas anfractuosas o punzocortantes, sucias, provocadas por elementos contaminados. El clostridium se halla en la materia fecal del ser humano y de los animales. Tiene la facultad de esporular (formar esporas). Estas últimas se encuentran en el suelo, en la tierra, etc. y son resistentes al calor, los antisépticos o los desinfectantes. Esta es la razón por la cual EL TÉTANOS NO SE PREVIENE SÓLO CON CURAR UNA HERIDA. Periodo de incubación: de 3 a 21 días y puede prolongarse a varios meses.

SÍNTOMAS DEL TETANOS

Se caracterizan por contracciones musculares dolorosas, primero en los músculos masticadores de la cara (maseteros). Este signo principal llamado TRISMUS, se puede comprobar por el endurecimiento (contractura) muscular que impide abrir la boca. Luego, pueden ocurrir contracciones en los músculos del cuello y los de tronco. Se presentan espasmos generalizados, a menudo inducidos por estímulos sensoriales.
Acompañan al trismus, el insomnio, los dolores generales que no disminuyen con analgésicos, endurecimiento de los músculos de la nuca y convulsiones. Todo esto ocurre con el paciente en estado consciente. La tasa de mortalidad varia del 10 al 90%, su valor máximo alcanza a los lactantes y a los ancianos.
Existe un índice de mortalidad elevada, ya que uno de cada tres adultos que la padece y todos los recién nacidos infectados fallecen por esa causa.
RESERVORIO: lo conforma el intestino de los caballos y otros animales, incluidos los humanos, en el cual el microorganismo es un habitante normal e inocuo.
Las esporas tetánicas están diseminadas ampliamente en el ambiente, y pueden contaminar heridas de todos lo tipos.

FORMAS DE TRANSMISIÓN DEL TÉTANOS

Las esporas tetánicas se introducen en el cuerpo, a través de una herida punzante contaminada con tierra, polvo de la calle o heces de animales o del hombre, o en desgarros o quemaduras. A veces surgen tétanos post-quirúrgicos (contraídos en el quirófano o la sala de internación)
No se transmite directamente de una persona a otra.

TRATAMIENTO Y PREVENCIÓN DEL TÉTANOS

TRATAMIENTO: Inmunoglobulina tetánica (suero antitetánico) por vía intramuscular, antibióticos específicos, y asistencia mecánica, (especialmente respiratoria), según la situación.

PREVENCIÓN: La inmunidad activa se induce por el toxoide tetánico (vacuna antitetánica) y persiste por lo menos 10 años después de la inmunización completa (TRES DOSIS DE VACUNA CON INTERVALO DE UN MES LAS DOS PRIMERAS Y DE UN AÑO PARA LA TERCERA).
Ante cualquier herida, el programa preventivo completo se instituye adosando a la primer dosis de vacuna (toxoide), una dosis de suero antitetánico (antitoxina) (gammaglobulina específica), que protege durante tres semanas, hasta la producción de anticuerpos propios.
Existen dos tipos de tétanos que tienen significación a pesar de ser menos frecuentes:

  • El tétanos quirúrgico, que se adquiere por contaminación de la herida quirúrgica, ya sea en el acto intraoperatorio o en el postoperatorio, por insuficiente limpieza de quirófanos o salas de internación. La profilaxis en las operaciones programadas se efectúa 2 meses antes de la intervención por dos dosis de vacunas con un intervalo de 1 mes.
  • El tétanos neonatal es un problema grave de salud en muchos países en desarrollo donde los servicios de maternidad son limitados y la inmunización contra el tétanos es inadecuada. Se produce por la contaminación del cordón umbilical con las esporas tetánicas en el momento del parto o en los primeros días de vida.
MEDIDAS QUE SE TIENEN QUE CUMPLIR EN EL CASO DE HERIDA PUNZANTE O CORTANTE PARA PREVENIR EL TÉTANOS
Ante una lesión punzocortante, ocasionada por un objeto sólido, sea de metal (aguja, clavo, cuchillo, alambre, etc.) o espinas de plantas (rosas, cactus, etc) se tiene que limpiar la herida con agua abundante agua, dejándola correr por unos minutos.
Si se cuenta con jabón, en cualquiera de sus formas, se debe volver a lavar la lesión con agua jabonosa y luego enjuagar. De contar con gasa estéril, se debe proceder a su secado pora luego colocar cualquier solución antiséptica Luego coloque cualquier antiséptico.

    • Si recibió una herida y no está vacunado, además de recibir la primera dosis de vacuna, debe aplicarse en el mismo momento una dosis gammaglobulina antitetánica. Para tener cobertura durante 10 años, luego de recibir la primera dosis, al mes debe recibir la segunda dosis. Finalmente, para completar el esquema, al año debe recibir la tercera dosis.
    • Si va a ser sometido a una intervención quirúrgica, tiene que hacer todo lo señalado en el caso anterior.
    • La vacuna antitetánica produce, en un tercio de los vacunados, dolor y enrojecimiento de la zona de aplicación. No debe preocuparse, colocando compresas frías la inflamación cede.
    • Si Ud. está vacunado en forma adecuada, es decir: tiene el esquema completo de las tres dosis (dadas en el transcurso de un año) no tiene riesgo de adquirir el tétanos.
    • Pocas situaciones tan graves, como el tétanos, son tan fáciles de prevenir. Si no está inmunizado adecuadamente, consulte con su médico o acérquese a cualquier hospital público de la ciudad de Buenos Aires, para iniciar y completar el esquema.

Herpes simple

Es una infección viral que afecta principalmente la boca o el área genital.

Causas

Existen dos cepas diferentes del virus del herpes simple:
  • El virus del herpes simple tipo 1 (VHS-1) que usualmente está asociado con las infecciones de los labios, la boca y la cara. Es el herpes simple más común y muchas personas lo desarrollan en la niñez. Con frecuencia, causa lesiones dentro de la boca como herpes labial (herpes febril) o infección ocular (especialmente la conjuntiva y la córnea) y también puede llevar a infección del revestimiento del cerebro (meningoencefalitis). Se trasmite por contacto con saliva infectada. En la adultez, del 30 al 90% de las personas tendrá anticuerpos contra el VHS-1. La probabilidad de una infección en la niñez es más alta en personas de estrato socioeconómico bajo.
  • El virus del herpes simple tipo 2 (VHS-2) se transmite por lo general, aunque no siempre, por contacto sexual. Los síntomas abarcan úlceras o llagas en los genitales. Sin embargo, algunas personas con VHS-2 son asintomáticos. Hasta el 30% de los adultos en los Estados Unidos presentan anticuerpos contra este virus. La infección cruzada de los virus tipo 1 y 2 puede ocurrir a causa del contacto orogenital. Es decir, usted puede desarrollar el herpes genital en la boca y el herpes oral en su área genital.
Una infección de un dedo de la mano, llamada panadizo herpético, es otra forma de herpes que, por lo general, afecta a los médicos que están expuestos a la saliva durante los procedimientos. Algunas veces, los niños también pueden contraer la enfermedad.
El virus del herpes puede infectar al feto y causarle anomalías. Una mujer que esté infectada con herpes puede trasmitirle el virus a su bebé durante el parto vaginal, especialmente si la madre tiene una infección activa en el momento de dar a luz. Sin embargo, del 60 al 80% de las infecciones por VHS adquiridas por recién nacidos ocurren en mujeres que no tienen síntomas de dicha infección o antecedentes familiares de infección genital por VHS.
Es posible que el virus se transmita incluso cuando no haya ningún síntoma o úlcera visible. Dos tercios de las personas con infección genital por VHS no presentan recurrencias de sus síntomas y un tercio tiene tres o más recurrencias (brotes) por año.
El VHS nunca se elimina del cuerpo; permanece latente y puede reactivarse, lo que causa síntomas.

Síntomas

  • Ampollas o úlceras, con mayor frecuencia en la boca, los labios, las encías o los genitales
  • Inflamación de los ganglios linfáticos en el cuello o en la ingle (por lo general, sólo en el momento de la infección inicial)
  • Herpes febril
  • Fiebre, especialmente durante el primer episodio
  • Lesiones genitales: primero puede haber una sensación de ardor u hormigueo
  • Úlceras bucales

Pruebas y exámenes

Muchas veces, los médicos pueden deducir si la persona tiene una infección por herpes simple con solo mirar las lesiones; sin embargo, se pueden ordenar algunos exámenes para confirmar el diagnóstico. Estos exámenes abarcan:
  • Examen de sangre para anticuerpos de VHS (serología)
  • Examen de anticuerpos fluorescentes directos (AFD) de células tomadas de una lesión
  • Cultivo viral de la lesión

Tratamiento

Algunos casos son leves y pueden no necesitar tratamiento.
Las personas que tienen brotes prolongados o severos (especialmente si es el primer episodio), las que tienen problemas del sistema inmunitario o aquellas con recurrencias frecuentes se beneficiarán de medicamentos antivirales como aciclovir (Zovirax), famciclovir (Famvir) y valaciclovir (Valtrex).
Las personas que tienen recurrencias severas o frecuentes de herpes genital o herpes oral pueden optar por seguir tomando medicamentos antivirales para reducir la frecuencia y severidad de dichas recurrencias.

Pronóstico

Las lesiones orogenitales generalmente sanan por sí solas en un lapso entre 7 y 10 días. La infección puede ser más severa y durar mucho más tiempo en personas que tengan una afección que debilite su sistema inmunitario.
Una vez que ocurre la infección, el virus se disemina a las neuronas y permanece en el organismo de la persona por el resto de su vida. El virus se puede reactivar de vez en cuando y ocasionar síntomas o brotes. Las recurrencias se pueden desencadenar por el exceso de luz solar, fiebre, estrés, enfermedad aguda y medicamentos o afecciones que debiliten el sistema inmunitario (como cáncer, VIH/SIDA o el uso de corticosteroides).

Posibles complicaciones

  • Eccema herpetiforme (herpes generalizado a través de la piel)
  • Encefalitis
  • Infección de los ojos, queratoconjuntivitis
  • Infección de la tráquea
  • Meningitis
  • Neumonía
  • Infección prolongada y severa en personas inmunodeficientes
Hepatitis
La Hepatitis B es causada por un virus que afecta al hígado. El virus, llamado virus de la hepatitis B (VHB), puede causar una infección para toda la vida, cirrosis (cicatrización) del hígado, cáncer del hígado, falla hepática y la muerte.
El VHB se propaga cuando la sangre o fluidos corporales de una persona infectada entran al cuerpo de una persona no infectada. Por ejemplo, el VHB se contagia al tener relaciones sexuales con una persona infectada sin usar condón (se desconoce la eficacia de los condones de látex para evitar la infección por el VHB, pero su uso adecuado puede reducir el riesgo de contraer el virus), al compartir drogas, jeringuillas o equipo para preparar drogas ilegales que se inyectan, al pincharse con una aguja usada en el trabajo o de una madre infectada a su bebé durante el parto.
La hepatitis B no se contagia a través de comida, agua, compartir utensilios para comer, amamantar, abrazar, besar, toser, estornudar ni por contacto casual.
El HBsAg se detectará en la sangre de la persona infectada en un tiempo promedio de 4 semanas (intervalo de 1-9 semanas)después de la exposición al virus. Cerca de 1 de cada 2 pacientes ya no podrán contagiar a otros luego de 7 semanas después de la aparición de los síntomas y en todos los pacientes, que no permanezcan infectados de manera crónica, la prueba HBsAg será negativa a las 15 semanas después de la aparición de los síntomas.
Si los síntomas aparecen, estos aparecen en un promedio de 12 semanas (intervalo 9-21 semanas) después de la exposición al virus de la hepatitis B. Los síntomas aparecen en cerca de un 70% de los pacientes. Los síntomas se presentan con más frecuencia en los adultos que en los niños.
En algunas ocasiones, una persona infectada con el VHB no presenta síntomas. Entre mayor sea la edad del paciente, mayores son las posibilidades de que tenga síntomas. Usted puede estar infectado con el VHB (y pasar el virus a otros personas) sin saberlo.

Si tiene síntomas, estos podrían incluir:
  • piel amarrilla o parte blanca de los ojos amarillenta (ictericia)
  • cansancio
  • pérdida del apetito
  • náusea
  • malestar abdominal
  • orina oscura
  • excremento de color arcilla
  • dolor en las articulaciones
Usted está en un riesgo mayor de contraer la infección por el VHB si:
  • tiene relaciones sexuales con alguien infectado con el VHB
  • tiene relaciones sexuales con más de una pareja
  • se inyecta drogas
  • es hombre y tiene relaciones sexuales con otro hombre
  • vive en el mismo hogar con alguien que padece de infección crónica (largo plazo) por el VHB
  • tiene contacto con sangre humana en su trabajo
  • es cliente de una institución para personas con impedimentos en el desarrollo
  • tiene hemofilia
  • viaja a lugares donde la hepatitis B es común
  • No existen medicamentos disponibles para la infección por el VHB que se ha adquirido recientemente (aguda). Existe una vacuna contra la hepatitis B para evitar la infección por el VHB. Existen medicamentos antivíricos aprobados para el tratamiento de la infección crónica por el VHB.
Debe hacerse una prueba de sangre para verificar la existencia de la infección por el VHB al principio de su embarazo. Esta prueba se llama antígeno de superficie de la hepatitis B (HBsAg). Si los resultados de la prueba HBsAg fueron negativos al principio del embarazo, pero continúa con comportamientos que la colocan en riesgo de contraer una infección por el VHB (p.ej., más de una pareja, usar drogas que se inyectan), debería hacerse la prueba HBsAg cerca del final del embarazo. Si los resultados de la HBsAg son positivos, significa que está infectada con el VHB y puede pasarle el virus a su bebé. Los bebés que se contagiaron con el VHB en el nacimiento pueden desarrollar una infección crónica por el VHB que puede provocar cirrosis o cáncer del hígado.
Si el resultado de la prueba de sangre es positivo, el bebé debe recibir la primera dosis de la vacuna contra la hepatitis B junto con otra inyección de la inmunoglobulina de la hepatitis B (llamada HBIG), en el nacimiento. La segunda dosis de la vacuna debe ser administrada durante los primeros dos meses de edad y la tercera dosis a los 6 meses (pero no antes de las 24 semanas de edad).
Si tuvo algún tipo de hepatitis viral después de los 11 años de edad, no puede donar sangre. Además, si los resultados de las pruebas alguna vez han sido positivos a la hepatitis B o a la hepatitis C, a cualquier edad, usted no reúne los requisitos para donar sangre, aún si nunca estuvo enfermo o sufrió de ictericia a causa de la infección.
El VHB puede vivir fuera del cuerpo al menos durante 7 días y todavía ser capaz de causar la infección.